El hipo del feto es algo muy normal y muy común en la gestación. Se percibe principalmente a partir del último trimestre de embarazo, aunque se desconoce si en las primeras etapas del embarazo también ocurre.
El hecho de que el bebé tenga hipo no es preocupante, la madre, por lo tanto, no debe alarmarse. Se trata de un hecho normal debido a la inmadurez del bebé, cuyo diafragma se contrae en determinadas situaciones. Los expertos apuntan a que el hipo es otra faceta más del desarrollo del bebé, quien está entrenándose para respirar fuera del útero. El diafragma sufre estos espasmos para ejercitarse. Y es que, aunque los pulmones del bebé no comenzarán a funcionar hasta que nazca y no entran en ellos aire, sí puede penetrar líquido amniótico.
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